Categoría: Comidas Regionales

Cómo hacer un buen asado santiagueño
Es en este plato argentino (y por lo tanto santiagueño), que se queman los libros de casi todos los cocineros del país. Porque hay tantas recetas como asadores y las discusiones acerca de las calidades de las carnes más apropiadas, los fuegos, la sal, los condimentos, las cantidades, las ensaladas, las parrillas, los tiempos, son tan eternas como interminables.
Lo que sí es seguro es que con una buena carne hasta el más inútil le sale un buen asado; el buen asador se ve cuando la carne es mala.
En Santiago y en casi todo el país, el asado más que una comida es un ritual, tal como la ceremonia del té de los japoneses.

Humita en dos presentaciones, en chala y a la olla
La humita reconoce dos preparaciones en la cocina santiagueña, en chala y a la olla. Ninguna es mejor que la otra, se trata de una cuestión de costumbres, hay quienes la prefieren de una manera y quienes la consumen de la otra.
En lo que sí hay cierto acuerdo es que la humita en chala no lleva zapallo, (anco), mientras que la que hace a la olla sí lo lleva. En Santiago no se acostumbra, como en otros lugares, agregarle azúcar a esta comida. Y últimamente se prefiere agregarle mucho queso, si es tipo parmesano, mejor.

Tamal: Receta de los primitivos habitantes
El tamal es quizás una de las pocas comidas cuya receta original venga de los primitivos habitantes de esta tierra, como que su preparación, con las lógicas diferencias de acuerdo a cada región, es típica de América, desde Méjico hasta Tierra del Fuego.
Los ingredientes: 400 gramos de harina de maíz, sal y pimienta, ají molido, pimentón dulce, pimentón picante, 50 gramos de manteca o margarina, tres cuartos de carne, preferiblemente de la cabeza de la vaca, dos tomates, aceitunas verdes (algunos no le ponen), dos huevos duros, pasas de uva (opcional) y hojas de choclo o chalas en cantidad necesaria.